retoque fotográfico: nadie es perfecto

¿Quieres ser "perfecta" como las modelos que aparecen en las revistas? Hay chicas que se deprimen por sentir que nunca tendrán esa piel perfecta, esas formas, ese cabello brillante y voluminoso y, por tanto, nunca serán como las mujeres que aparecen en las revistas.
Hay una buena noticia para todas: las mujeres que aparecen en las revistas tampoco son perfectas.
Solamente se ven perfectas, como resultado de muchos factores distintos, de los cuales su aspecto es sólo una parte.

Para que la modelo cree una ilusión (que es su trabajo, como decimos en la definición de modelo) la fotografía hace su parte... pero sólo es una ilusión.

Muchas chicas, cuando ven una fotografía suya en el visor de la cámara durante una sesión en la que estamos trabajando, suelen decirme: "no parezco yo". Están acostumbradas a verse de frente, con mala luz, en el baño o al maquillarse. No se ven como las veo yo: con una iluminación destinada a resaltar lo mejor de su aspecto y disimular lo imperfecto, un maquillaje pensado para fotografía, un peinado profesional y en ángulos que las favorecen.

Y en las fotografías de carné  la cosa es mucho peor, como todos sabemos.

La luz, el maquillaje, el peinado, el ángulo, ayudan a crear una ilusión.

Pero la ilusión se apoya también, muchas veces, en el retoque fotográfico.
Para algunos tipos de fotografía, el retoque es muy discreto: quitar un grano, suavizar una arruga, resaltar el blanco de los ojos o dientes, quitar un pelo rebelde que cruza la cara de la modelo, etc. Es lo que hacemos generalmente en nuestro estudio, pero siempre lo hacemos en mayor o menor medida. La fotografía no es "real", es una visión de la realidad, solamente.

Y cuando se trata de una portada de revista, de campañas de publicidad, o de las fotografías de una publicación como Playboy, el retoque puede ser verdaderamente una operación de cirugía estética de alto nivel : se afina la forma de la cara, se borran todos los poros para suavizar la piel hasta parecer porcelana, se quitan todas las arrugas, se eliminan las bolsas debajo de los ojos, se compensan las sombras molestas, se resalta el color de los ojos, se reduce la cintura... se hacen crecer los pechos, se quitan venas, se aumenta la cadera o las nalgas, se da forma a las piernas, se ajusta el tono de piel ... el cambio de una foto tal como sale de la cámara a la que se publica puede ser absolutamente radical.

Lo que vemos es un trabajo de retoque que en ocasiones acaba convertido casi en un dibujo realizado sobre una fotografía.
No puedes ser como la modelo que aparece en la revista porque tampoco la modelo es así.
Sólo la fotografía es así.

Un ejemplo lo tenemos en el trabajo de Glenn Feron, que se dedica únicamente al trabajo de retocar fotografías para revistas, y con modelos que no son precisamente unas desconocidas, como Hale Berry o Kylie Minogue. Si visitas su pagina y haces clic en cualquiera de las fotos que hay allí, verás una foto "de portada". Al pasar el ratón por encima de ella, podrás ver la fotografía original. Mira los cambios, las arrugas que desaparecen, las bolsas de los ojos, la textura de la piel, la voluptuosidad de senos y caderas... prácticamente todo está retocado.

Como modelo, puedes ser la base de una ilusión, pero nunca pierdas de vista el hecho de que debemos saber qué es una ilusión y qué no, y que es mucho más importante ser fresca, genuina, segura de ti misma, profesional y preparada que ser físicamente "perfecta" según uno u otro canon de belleza.


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